< Salmos 124 >
1 Un cántico para los peregrinos que van a Jerusalén. Un salmo de David. Si el Señor no hubiera estado para nosotros, ¿Qué habría pasado? Todo Israel diga:
Canción de las gradas: de David. Al no haber estado el SEÑOR por nosotros, diga ahora Israel:
2 Si el Señor no hubiera estado para nosotros, ¿Que hubiera pasado cuando los pueblos nos atacaron?
Al no haber estado el SEÑOR por nosotros, cuando se levantaron contra nosotros los hombres,
3 Nos hubieran tragado vivos al encenderse su furor contra nosotros.
vivos nos habrían entonces tragado, cuando se encendió su furor contra nosotros.
4 Se hubieran precipitado como una inundación; nos habrían arrastrado por completo como una corriente torrencial.
Entonces nos habrían inundado las aguas; sobre nuestra alma hubiera pasado el torrente;
5 Habrían pasado por encima de nosotros con fuerza como aguas furiosas, ahogándonos.
hubieran entonces pasado sobre nuestra alma las aguas soberbias.
6 Alaben al Señor, quién no nos entregó a ellos como presas para ser destruidos por sus dientes.
Bendito el SEÑOR, que no nos dio por presa a sus dientes.
7 Escapamos de ellos como pájaros huyendo del cazador. ¡La trampa se rompió y volamos lejos!
Nuestra alma escapó cual ave del lazo de los cazadores; se quebró el lazo, y escapamos nosotros.
8 Nuestra ayuda viene del Señor, quien hizo los cielos y la tierra.
Nuestro socorro es en el Nombre del SEÑOR, que hizo el cielo y la tierra.