< Psalms 28 >
1 Unto thee will I cry, O Yhwh my rock; be not silent to me: lest, if thou be silent to me, I become like them that go down into the pit.
A ti clamo, oh Señor, mi Roca; no me niegues tu respuesta, para que no llegue a ser como aquellos que descienden al inframundo.
2 Hear the voice of my supplications, when I cry unto thee, when I lift up my hands toward thy holy oracle.
Escucha la voz de mi oración, cuando te clamo, cuando mis manos se eleven a tu lugar santo.
3 Draw me not away with the wicked, and with the workers of iniquity, which speak peace to their neighbours, but mischief is in their hearts.
No me lleven lejos con los pecadores y los trabajadores del mal, que dicen palabras de paz a sus vecinos, pero el mal está en sus corazones.
4 Give them according to their deeds, and according to the wickedness of their endeavours: give them after the work of their hands; render to them their desert.
Dales la recompensa conforme a la perversidad de los sus actos y de sus maldades: dales castigo conforme a las obras de sus manos.
5 Because they regard not the works of Yhwh, nor the operation of his hands, he shall destroy them, and not build them up.
Porque no tienen respeto por las obras del Señor, ni por las cosas que sus manos han hecho, serán destruidos y no los vuelva a levantar.
6 Blessed be Yhwh, because he hath heard the voice of my supplications.
Que el Señor sea alabado, porque ha escuchado la voz de mi oración.
7 Yhwh is my strength and my shield; my heart trusted in him, and I am helped: therefore my heart greatly rejoiceth; and with my song will I praise him.
El Señor es mi fortaleza y mi coraza, mi corazón tenía fe en él y él me ayudó; por esta causa, mi corazón está lleno de gozo, y lo alabaré en mi canción.
8 Yhwh is their strength, and he is the saving strength of his anointed.
El Señor es la fortaleza de su pueblo, y un fuerte lugar de salvación para su ungido.
9 Save thy people, and bless thine inheritance: feed them also, and lift them up for ever.
Sé un salvador para tu pueblo, y envía una bendición sobre tu herencia: sé su guía, y sustentalos para siempre.