< 約伯記 41 >
¿Puedes tú sacar con un anzuelo el cocodrilo, atar con una cuerda su lengua?
2 你豈能以鼻圈穿過牠的鼻子,以鉤子刺透牠的腮骨﹖
¿Pondrás una soga en su nariz, y perforarás con garfio su quijada?
¿Se acercará a ti con palabras sumisas o te hablará con lisonjas?
¿Hará un pacto contigo para que lo tomes como esclavo perpetuo?
5 你豈能玩弄牠像玩弄小鳥,將牠縛著作你女兒的玩物﹖
¿Jugarás con él como con un pájaro? ¿Lo atarás para entretener a tus niñas?
¿Los comerciantes harán negocio por él? ¿Lo cortarán en trozos entre los mercaderes?
¿Podrás abrirle el cuero con lancetas, o su cabeza con arpones?
8 將你的掌撫在牠身上罷! 若你想到惡鬥,決不敢再撫。
Pon tu mano sobre él. Recuerda la batalla con él. No lo volverás a hacer.
Ciertamente la esperanza de esta pelea queda frustrada. Un hombre desfallece con solo verlo.
10 沒有一個勇敢的人敢觸犯牠,有誰還敢站立在牠前面呢﹖
Nadie se atreve a despertarlo. ¿Entonces quién puede estar en pie delante de Mí?
¿Quién me dio primero a Mí, para que Yo le restituya? Todo lo que hay debajo del cielo es mío.
12 論牠的四體百肢,我不能緘默;論牠的力量,我要說:沒有可與牠相比的。
No guardaré silencio acerca de sus miembros, ni de su gran fuerza ni de su excelente figura.
¿Quién levanta la primera capa de su envoltura y penetra a través de su doble coraza?
¿Quién abre la parte posterior de su boca rodeada de dientes espantosos?
Sus fuertes escamas son su orgullo, cerradas entre sí como firme sello,
tan unidas la una con la otra que ni el aire pasa entre ellas.
Están soldadas, cada una a su vecina, trabadas entre sí, no se pueden separar.
Su estornudo lanza destellos de luz. Sus ojos son como los párpados de la aurora.
De la parte posterior de su boca salen llamaradas y se escapan centellas de fuego.
De sus fosas nasales sale vapor como el de una olla que hierve al fuego.
Su aliento enciende los carbones. Salen llamaradas de las partes posteriores de su boca.
22 牠的力量集中在牠的頸上,在牠面前,沒有不恐怖的。
En su nuca se asienta la fuerza. Ante él cunde el terror.
Los pliegues de su carne son compactos. Están firmes en él y no se mueven.
Su corazón es duro como la piedra, como la piedra inferior de un molino.
Cuando se levanta, tiemblan los valientes, y por el quebrantamiento, retroceden.
La espada no lo alcanza, ni la lanza, ni la lanceta, ni la flecha, ni la lanza arrojadiza.
Para él el hierro es como pasto, y el bronce, madera carcomida.
No lo ahuyentan las flechas. Las piedras de la honda le son como rastrojo.
Los garrotes le son como hojarasca. Se burla del brillo del arma arrojadiza.
Por debajo tiene conchas puntiagudas, se extiende como un trillo sobre el lodo.
Hace lo profundo del mar hervir como una olla. Lo convierte como una olla de ungüento.
Detrás de él brilla una estela de agua como barba encanecida.
Nada hay semejante a él sobre la tierra. Fue hecho exento de temor.
Menosprecia todo lo elevado. Es rey de todos los hijos del orgullo.